La adicción es una enfermedad que no solo afecta al adicto, su familia y entorno sufre el problema como el propio adicto. Pero, el papel de la familia es fundamental para ayudar al familiar adicto y conseguir su recuperación.

El adicto por sí mismo no tiene capacidad para salir, además es incapaz de ver que necesita un cambio. Debido a que sus capacidades cognitivas, de razonamiento y entendimiento no le permiten hacer un cambio, porque está atrapado.

En este caso, la familia es la protagonista de la situación y puede forzar la situación cogiendo las riendas y conduciendo a su ser querido hacia la recuperación. 

La familia son los primeros que se dan cuenta del problema, porque en muchas ocasiones el paciente vive autoengañado.

La familia puede observar lo que el adicto no es capaz de ver. El problema es que se sienten incapaces de controlar la situación.

El centro Tibbon te recomienda 8 pautas para poder ayudar a un familiar adicto.

 

1. A Través del amor duro.

Practicar el amor duro significa que te quiero, pero ayudo. Hay que tener determinación.

Por miedo los familiares usan un te quiero y te protejo, sin embargo, lo que se consigue es un sustento del problema, aumentándolo y perjudicando al ser querido, sin fomentar ninguna solución.

No le des a la persona adicta opciones, toma medidas permanentes.

2. Hacer un trabajo de conciencia.

Hay que saber qué sucede. En ocasiones, cuando no se sabe qué está pasando, sin ser conscientes se sustenta e incita el problema. 

Es importante, conseguir que un grupo familiar haga presión y no sea solo uno el que tenga conciencia del problema.

Todo el núcleo familiar unido y trabajando juntos, conduce al paciente hacia la recuperación.

3. No sentirse culpable.

El adicto vive una realidad, que no es la que percibe la familia y tiende a justificar sus comportamientos por vivencias del pasado, echando en muchas ocasiones la culpa a familiares. 

El miedo y el autoengaño en el que vive el adicto le impide que pida ayuda y vaya a rehabilitación.

Para ayudarle a entrar en tratamiento, el primer paso es que el familiar debe de dejar de entender como lógicos comportamientos que no lo son y comprender que el adicto está enfermo. 

4. No justificar.

El adicto considera que lo que hace tiene justificación, ya que es un problema de su personalidad o un trastorno psicológico derivado de su ansiedad o depresión.
La familia se cree este argumento, le sobreprotege y le justifica.

Cuando vives con un adicto e intentas ayudarlo comprendiendo su victimismo, apoyando su malestar. Estás en una posición equivocada, sosteniendo la enfermedad y alargando el problema.

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5. No sostener la enfermedad.

El adicto tiene la sensación de que controla la situación o el sentimiento de que en un futuro su adicción se puede curar.

La familia cubre sus errores, tapa sus fracasos y se hace cargo de las responsabilidades del adicto. Ej.: te levanto por las mañana para que no dejes de ir al trabajo.

Este comportamiento de la familia, dilata en el tiempo el problema y el adicto no es capaz de ver el desastre y, por tanto, no piensa que necesite ayuda.

El papel de la familia es casi dejarle caer, a pesar del dolor y la impotencia que sientas. Dejarle tocar fondo es una de las maneras de que el adicto pueda ser consciente de que tiene un problema. 

6. La negación.

El concepto de lo que se entiende por adicto está muy estigmatizado por la sociedad y es imposible imaginar que ni tu hijo, ni tu pareja tienen pinta de lo que te imaginas por adicto.
Por eso, la negación es una parte compartida entre el adicto y su familia. 

La negación se refiere, a la incapacidad de asociar que tu familiar puede ser un adicto y debido a esto, se intenta como hemos dicho antes justificar comportamientos.

Sin embargo, la adicción está muy extendida en la sociedad y es un concepto que hay que desestigmatizar y afrontarlo para poder ayudar a quien la sufre.

7. La familia debe protegerse a sí misma.

La familia tiene dependencia afectiva con ese ser querido adicto, pero debe separarse de la persona afectada y protegerse a sí mismo.

Como miembro de la familia, gran parte del bienestar, autoestima y felicidad del entorno familiar dependen del adicto y supone un problema añadido estar bien sin que el otro lo esté.

Para evitar sentirse mal, la familia debe poner el foco en sí mismo para protegerse de la dinámica de mentiras y engaños que un adicto crea a su alrededor.

8. El sufrimiento.

Este sentimiento está presente siempre que se quiere iniciar un proceso de recuperación, no obstante una de las cosas que se mejoran tras ir a rehabilitación son las relaciones dentro de la familia.

Los familiares tras recibir terapia y ayuda, entienden el problema del adicto y no lo afrontan con miedo, ni sufrimiento.

Es importante, comprender que en un programa de rehabilitación los familiares que ayudan también necesitan ser ayudados.

Por su parte, el adicto tras pasar por rehabilitación se reconcilia consigo mismo y los demás. Deja de sentirse culpable y comienza a sentirse entendido o comprendido por su núcleo, abandonando el sentimiento de culpa.

Dejar de sufrir significa un beneficio para ambas partes (familia y adicto) y supone la mejora de las relaciones familiares. Ya no hay que mentir, ni ocultar.

 

¿Qué tipo de recurso terapéutico tendría en Tibbon?

En una primera instancia antes del tratamiento, se realiza el acompañamiento. Ayudar al adicto sin tapar, ni corregir, sin dar sensación de falso control y ayudarle a ver y a esperar el momento oportuno, para intervenir y convencer al familiar que consume de qué puede hacer un tratamiento de rehabilitación para recuperar su vida.

La familia tiene muchos mecanismos que pueden acelerar el proceso y en Tibbon te guiamos para que puedas activar estos mecanismos. 

El adicto y la familia no compartirán nunca la percepción del problema de adicción.
Por eso, la familia es una fuente importante dentro del proceso de recuperación porque son los que tienen capacidad de observar la realidad y explicar a los terapeutas que está pasando, para que nuestro equipo de profesionales pueda identificar el mejor camino de actuación.

La familia forma parte del equipo del proceso y son fundamentales para contemplar cambios y prevenir comportamientos de riesgo.

 

Ayuda

Si tras leer este post necesitas más información de cómo ayudar a un familiar drogadicto o adicto, contacta con Tibbon y centro para el tratamiento de las adicciones, te aclararemos cualquier aspecto relacionado con cómo ayudar a dejar y salir de la adicción de cualquier sustancia. La primera consulta es gratuita.

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¿Cómo ayudar a un familiar que tenga una adicción? El papel de la familia

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